¿Cómo hacer la maleta perfecta? 5 consejos de Marie Kondo
¿Preparar el equipaje es lo que más pereza te da cuando te vas de vacaciones? Si eres de los que desafían las leyes de la física cuando cierras el trolley, de los que llevan ropa y zapatos que regresan tal cual se fueron o de los que van ‘armados’ para una catástrofe nuclear, pero olvidan el cepillo de dientes o el líquido de las lentillas, te enseñamos cómo hacer la maleta perfecta.
Lo hacemos de la mano de Marie Kondo, conocida como la gurú del orden a nivel mundial. Con más de 12 millones de ejemplares vendidos, su bestseller La magia del orden: herramientas para ordenar tu casa-- ¡y tu vida! se ha convertido en la ‘biblia’ de la organización como disciplina. En esta obra, la japonesa también dedica algunas pautas de su método a cómo hacer la maleta de forma eficiente. ¡Toma nota!
#1 Planifica lo que vas a necesitar
Igual que recomiendan ir al supermercado con una lista de productos predefinida a la que ceñirte, y no acabar con un carrito lleno de galguerías, al preparar el equipaje es importante que estudies qué vas a necesitar realmente. Lo mejor es que elabores por escrito una relación de artículos.
En este sentido, ten en cuenta el destino que has elegido, el tiempo que hará, los días que vas a estar fuera, el tipo de alojamiento en el que te hospedarás, las actividades que vas a realizar, si tienes algún plan especial… Por ejemplo, si te vas de camping a una playa recóndita, tendrás que llevarte toalla de ducha y para la arena, así como un par de bañadores. En cambio, si esa escapada de sol y mar es en un resort de lujo, allí dispondrás de toda la ropa de cama que necesites e, incluso, puede que te faciliten toallas para la playa.
#2 Elimina los ‘por si acaso’
Una vez que tienes un planning de tus vacaciones, haz de la concisión tu mantra. Es decir, si la idea es realizar turismo rural por el día y salir a dar un paseo por la noche, elige un único outfit para cada momento. Para evitar sorpresas ‘in situ’, pruébate en casa los diferentes modelos al completo. Así te asegurarás de que la ropa que has seleccionado “te hace feliz”, como aconseja la autora. Lo mismo con el neceser. Olvídate de todas esas muestras que llevan meses guardadas en cajón; es mejor que lleves botes pequeños rellenos con los productos que usas a diario y dejes en tu domicilio los artículos de uso esporádico o de los que desconozcas su efecto en tu piel.
También es una buena idea que trates de utilizar prendas combinables entre sí, como una especie de “armario cápsula”. Por ejemplo, si tienes un viaje por motivos de trabajo, en lugar de llevarte esos zapatos naranjas que solo pegan con unos de tus modelos o esos pantalones estampados que te pones con una camisa concreta, ¿por qué no optas por unas sandalias en tonos crudos o unos vaqueros clásicos? De este modo, con poca ropa y algunos accesorios puedes crear diversos estilismos.
#3 Prepara el equipaje de una sola vez
A la hora de afrontar cómo hacer la maleta hay dos extremos: las personas que empiezan los preparativos semanas antes y las que lo dejan para última hora. Ninguna es la opción más correcta. En el primer caso, corres el riesgo de que tu lista de ‘must-haves’ vaya aumentando día a día hasta que no quepa ni un alfiler. En el segundo, lo más probable es que te olvides de cosas básicas o que, cuando deshagas el equipaje en el destino, compruebes personalmente que las prisas nunca fueron buenas consejeras –en moda, tampoco-.
Por eso, la japonesa propone acometer esta labor, a ser posible, el día de antes y hacerla de una sola vez. Así podrás limitarte a meter lo que había en tu lista, sin ausencias, ni excesos. Además, ya conocerás con mayor seguridad el tiempo que va a hacer en el lugar de vacaciones, pudiendo afinar más la maleta (¿No va a llover? ¡Fuera paraguas!), y tendrás disponible todo lo que necesitas, sin que se quede en el tendedero ese pantalón que lavaste para la escapada.
#4 Clasifica y ordena todos los artículos
Hasta aquí la fase de planificación. Sin embargo, meter las cosas en la maleta también tiene su ciencia. Y es que, seguro que más de una vez te has vuelto loco buscando unos calcetines o unos pendientes dentro de la trolley que no aparecieron hasta tu vuelta a casa.
Para evitar este caos, nada mejor que clasificar los artículos por grupos: ropa, calzado, artículos de higiene, pequeños objetos, como bisutería o ropa interior, documentación, aparatos electrónicos… Además, en el caso de los artículos de menor tamaño, te resultará muy útil utilizar bolsas de plástico o de tela para mantenerlos localizados en cualquier momento.
#5 Dobla y apila en vertical
El orden de los factores también tiene un especial significado a la hora de saber cómo hacer la maleta perfecta. Si has jugado al Tetris sabrás de lo que te hablamos, ¿verdad? Coloca los artículos más pesados, como los zapatos, vaqueros y jerséis más gruesos en el parte que pega a las ruedas de la maleta o la base de la mochila. Actuarán de estabilizador y evitarás que otras prendas más delicadas se arruguen. Si necesitas llevar traje, dóblalo con cuidado y sitúalo cubriendo todo. Y utiliza las bolsas pequeñas para rellenar los huecos libres.
Otro truco del método KonMari: el doblado en vertical. Para rentabilizar el espacio de tu trolley o mochila no debes ir introduciendo la ropa extendida capa sobre capa, como si fuera una lasaña, sino que es mejor doblarla varias veces y poner los paquetitos resultantes uno al lado del otro, como si de una brocheta se tratara. De este modo, podrás ver de un vistazo todo lo que has llevado contigo.
Si sigues estas recomendaciones, seguro que enfrentarte a cómo hacer la maleta no te resultará nunca más un suplicio, incluso cuando vueles solo con equipaje de cabina en compañías lowcost. Es más, podrás viajar con mayor agilidad, tendrás espacio para volver con algún recuerdo de las vacaciones y podrás dedicar tu tiempo a disfrutar del viaje. ¡No sabes lo cómodo que te resultará no tener que pensar en qué ponerte o lamentarte por lo que has olvidado!