¿Buscas emociones fuertes? Prueba el aceite de oliva intenso
¿Eres de las personas a las que le gusta la comida picante, disfrutan con el sabor puro del limón o se toman el café solo, muy caliente y sin azúcar? Si te consideras un amante de las emociones fuertes –gastronómicamente hablando- el aceite de oliva intenso te encantará. Eso sí, descubre antes en qué consiste y de dónde proviene la intensidad en el aceite de oliva para evitar ser víctima de artificios publicitarios.
¿Qué es la intensidad en el aceite de oliva?
Dentro de la terminología del aceite de oliva, uno de los conceptos que se emplean habitualmente es la intensidad del producto, pero ¿de qué se trata exactamente?
Un aceite de oliva intenso es aquel que presenta, al ser degustado, un aroma y sabor penetrante y notables sensaciones de picor y amargor. Esto es debido a que el producto tiene un alto contenido de compuestos organolépticos, como polifenoles, vitaminas, oleuropeína, carotenos…, responsables de dar color, olor y sabor a los aceites de oliva y determinar si estamos ante un aceite de oliva intenso o suave.
Por este motivo, la intensidad es un atributo positivo propio de los aceites de oliva virgen extra, ya que son los que preservan de forma óptima las propiedades del fruto. Por el contrario, los aceites refinados pierden estas características en el proceso de refino. Así, cuando veas en una botella la denominación de aceite de oliva intenso o suave, sin más adjetivos, no le prestes atención; es solo un reclamo publicitario, pues dentro de los tipos de aceite de oliva, exclusivamente los virgen o virgen extra pueden tener estas características.
¿De qué depende la intensidad en el aceite de oliva?
Son varios los factores que van a definir el mayor o menor grado de intensidad de un aceite de oliva.
Así, el momento de la recogida es un elemento a tener en cuenta. Si la cosecha se realiza en verde, es decir, de forma temprana, el producto final va a presentar una mayor intensidad, puesto que el fruto mantiene todavía su complejidad organoléptica, que va perdiendo conforme madura.
Además, el trato conferido a la oliva durante el proceso de recolección y transporte a la almazara es también crucial para respetar las propiedades de la aceituna. En este sentido, el aceite de oliva intenso de calidad es recogido de forma manual, mediante la técnica del ordeño, llevado rápidamente a las instalaciones y, una vez allí, es cribado para eliminar los frutos dañados, asegurando que solo se emplean en el AOVE las aceitunas con el nivel de maduración adecuado.
Igualmente, la molturación en frío (a menos de 27 grados) garantiza que la oliva conserva sus propiedades organolépticas, encargadas de dotar al aceite de oliva de una alta intensidad.
La variedad de la aceituna en el aceite de oliva intenso
No obstante, el que hablemos de aceite de oliva intenso o suave también va a depender de la variedad de aceituna elegida para el producto. Es decir, un AOVE que no tenga mucho picor y amargor, no necesariamente va a ser de calidad inferior que otro que refleje más estas sensaciones.
Así, partiendo de AOVEs premium, puedes encontrar productos con mayor o menor intensidad en función del tipo de oliva empleado. En concreto, las variedades más potentes en boca son la Picual o la Hojiblanca, que presentan fuertes matices en el paladar. Por otro lado, variedades como la Arbequina o el Empeltre, por ejemplo, dan lugar a un AOVE más suave.
El aceite de oliva intenso de Hacienda Guzmán
Dentro de nuestra variedad de AOVEs Premium, en Hacienda Guzmán elaboramos el HG Reserva Familiar Manzanilla, nuestro primer aceite de oliva virgen extra que refleja el trabajo de 3 generaciones de aceiteros.
Este aceite de oliva intenso te permitirá experimentar un notable y persistente matiz frutado a la hoja y al tallo del olivo, con ligero amargor y picor, provocándote una fuerte sensación de frescor proveniente de la aceituna verde con un prolongado retrogusto. Una buena opción para disfrutar de un aceite de oliva virgen extra con carácter.
