¿Cuánto tiempo hace que no te das una vuelta por el campo? El mundo moderno ha provocado un distanciamiento cada vez mayor entre el ser humano y la naturaleza. Y, aunque no seas consciente en tu día a día, este alejamiento tiene consecuencias significativas para tu salud física y mental. Por ejemplo, ¿sabías que, según los estudios, los urbanistas tienen más probabilidades de sufrir estrés, ansiedad y depresión o de padecer más problemas cardiovasculares u obesidad? Por eso, te invitamos a que practiques la ecoterapia, una técnica con la que podrás acceder a los beneficios de estar en contacto con la naturaleza.

¿Qué es la ecoterapia?

La ecoterapia, también conocida como terapia verde, es una práctica terapéutica que utiliza la naturaleza como un medio para promover la salud y el bienestar. Se basa en la premisa de que la interacción con el entorno natural tiene efectos positivos para la mente y el cuerpo, apoyándose en la relación innata entre los seres humanos y el medio rural. De ahí esa idea generalizada de que “en el campo se vive mejor”.

Originada en Japón con la práctica del "shinrin-yoku" o "baño de bosque", la ecoterapia se ha extendido por todo el mundo. Aunque este vínculo entre las personas y la tierra es ancestral, su popularización se remonta a la década de los 90 del siglo pasado, con la publicación de La voz de la Tierra, de Theodere Roszac, padre de Ecopsicología. Y, hoy día, incluso hay países, como Canadá, donde los médicos pueden recetar a sus pacientes “pasar más tiempo en la naturaleza”.

¿Qué beneficios trae estar en contacto con la naturaleza?

Ten en cuenta que la interacción continuada con espacios verdes puede convertirse en la solución a muchos de tus problemas, físicos y mentales. ¿Cuáles son los beneficios de estar en contacto con la naturaleza?

1. Reducción del estrés. Numerosos estudios han demostrado que la ecoterapia reduce los niveles de cortisol, la hormona del estrés, mejorando así el estado de ánimo y la relajación y reforzando la capacidad de luchar contra la frustración. Y lo mejor es que sólo con 20 minutos de inmersión en la naturaleza notarás los efectos.
2. Salud mental. Pasar tiempo al aire libre también está asociado con una disminución en los síntomas de depresión y ansiedad. En este sentido, una investigación de la Universidad de Stanford reveló que una caminata de 90 minutos en la naturaleza puede reducir la actividad en las áreas del cerebro vinculadas a estas enfermedades mentales.
3. Mayor calidad del sueño. No es de extrañar que con unos niveles de cortisol bajos y un estado de ánimo óptimo, el contacto con la naturaleza también tenga un papel clave en la regulación de los ciclos de sueño. ¿No tienes la sensación de que logras un descanso más profundo y reparador tras un día entre árboles y animales?
4. Aumento de la creatividad. El contacto con la naturaleza también puede mejorar la función cognitiva y aumentar la creatividad. La desconexión de la tecnología y el entorno urbano permite que la mente se relaje y fluya libremente. Así lo puso de manifiesto otro estudio de la Universidad de Utah, que incluía una mayor agudeza mental entre los beneficios de estar en contacto con la naturaleza.
5. Incremento del rendimiento escolar. Esta mejora de las funciones cerebrales es especialmente importante en los niños y adolescentes, donde los beneficios de estar en contacto con la naturaleza se traducen en un mayor rendimiento académico. Así, las investigaciones sugieren que la ecoterapia en menores aumenta su capacidad de respuesta, memoria y concentración, mitiga la hiperactividad y favorece el desarrollo psicomotriz y sensorial.
6. Fomento de la conexión social. Junto a esto, las actividades en la naturaleza, como el senderismo o la jardinería comunitaria, fomentan las conexiones sociales y reducir el sentimiento de aislamiento. Incluso aunque te vayas solo, ya que ese vínculo con la tierra nos hace más empáticos y altruistas, según ha descubierto otra investigación.
7. Refuerzo del sistema inmunológico. Pero los beneficios de estar en contacto con la naturaleza también se producen en el plano físico. Por ejemplo, la exposición a los fitoncidas, compuestos químicos liberados por las plantas, puede aumentar la actividad de las células NK, esenciales para combatir infecciones y cánceres.
8. Reducción de la presión arterial. Estudios han desvelado que estar en contacto con la naturaleza puede disminuir la presión arterial, reduciendo así el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
9. Fortalecimiento del sistema respiratorio. ¿Tienes asma o alergias? Los entornos naturales también tienen un impacto positivo en tu bienestar respiratorio.
10. Beneficios para la vista. Hasta tu visión está afectada por los beneficios de estar en contacto con la naturaleza. ¿Sabías que por cada hora adicional que pasa un niño al aire libre su riesgo de padecer miopía de mayor se reduce hasta un 2%?

¿Cómo practicar la ecoterapia?

En definitiva, muchas veces no hay mejor ‘medicina’ que disfrutar de la naturaleza. Y para lograr todos estos beneficios de estar en contacto con la naturaleza, no hace falta que vayas abrazando árboles -que también funciona-. La ecoterapia aglutina todas las actividades dirigidas a promover ese contacto con la naturaleza, desde una simple caminata al aire libre hasta cultivar un huerto propio.

Por ejemplo, puedes andar descalzo por el césped de tu casa, si lo tienes, pasear por el parque más cercano a tu domicilio o acercarte al bosque o a la playa los domingos. También puedes incluir en tus próximos planes vacaciones escapadas rurales con las que reconectar con la naturaleza o aficionarte a deportes outdoor, como la escalada, el kayak, el ciclismo, el senderismo, la pesca… La horticultura también es una buena forma de ecoterapia que no sólo proporciona actividad física, sino también un sentido de logro y conexión con la tierra, ya sea en huertos propios, como en pequeños viveros caseros. Incluso si no tienes tiempo para todo lo anterior, llenar tu casa de plantas, abrir las ventanas para escuchar los pájaros o, a falta de éstos, poner música de ambiente con sonidos de la naturaleza también te ayudarán a invocar a Pachamama.

Por último, ¿qué te parece disfrutar de los beneficios de estar en contacto con la naturaleza al tiempo que satisfaces tu paladar? En Hacienda Guzmán te abrimos las puertas de nuestra finca para ofrecerte una experiencia única de conexión con la naturaleza a través del olivar y la producción de aceite de oliva. A través de nuestros programas de oleoturismo podrás recorrer nuestra olivoteca, participar en catas de aceite y aprender sobre la producción del AOVE ecológico mientras te sumerges en un entorno natural y tranquilo. ¡Reserva tu visita!