Cuáles son los aportes de la neuroarquitectura a la organización de eventos

Cualquiera que se dedique a la organización de eventos es consciente de que todos los detalles importan, desde la lista de asistentes, hasta el protocolo del acto. Y qué decir del espacio elegido. Una conferencia, un encuentro profesional, un evento corporativo y hasta una simple reunión de amigos puede variar en función del lugar en el que se desarrolle. Esto es, precisamente, lo que analiza la neuroarquitectura, una nueva disciplina que fusiona los conocimientos de la arquitectura y la neurociencia para crear experiencias cum laude. Pero, ¿conoces cuáles son los aportes de la neuroarquitectura a la organización de eventos?

¿Qué es la Neuroarquitectura y ejemplos?

Por si es la primera vez que escuchas el término, la neuroarquitectura se basa en comprender cómo el entorno construido afecta las emociones, bienestar físico y comportamientos de las personas. Es decir, se trata de generar un impacto positivo a través de los espacios. Como sostiene Frederick Marks, fundador de la Academia de Neurociencia para la Arquitectura de Estados Unidos (ANFA), “somos seres emocionales que cada vez que entramos a un espacio, reaccionamos”.

Eso sí, esto tiene una explicación científica: una región del cerebro, la Parahippocampal Place Area (PPA), se activa únicamente ante la percepción de lugares. Y teniendo en cuenta que los ciudadanos pasan más del 90% del tiempo dentro de edificios, es importante vigilar que estos sean adecuados, ¿no crees? Sin embargo, la Organización Mundial de la Salud advierte que el 30% de los edificios están enfermos, es decir, no ayudan al equilibrio de sus ocupantes.

Afortunadamente, la neuroarquitectura está implementándose en todos los ámbitos, si bien sus orígenes se remontan a mediados del siglo XX de la mano del virólogo Jonas Salk. Por ejemplo, en el diseño de oficinas se ha constatado que seguir determinados patrones de construcción y decoración incrementan la productividad y bienestar de los empleados, mientras que la colorimetría puede mejorar el proceso de aprendizaje en centros educativos. Asimismo, en los hospitales, un cuidado diseño de interiores permite reducir el estrés que conlleva una visita al médico. Por no hablar del propio hogar, otro ejemplo de cuáles son los aportes de la neuroarquitectura a la vida diaria, ya que una atmósfera acogedora y bien iluminada es la clave para liberar las tensiones de la jornada.

¿Cuáles son los aportes de la neuroarquitectura a la organización de eventos?

Ahora bien, además de sus implicaciones generales, esta disciplina también debe estar muy presente en la organización de eventos. ¿Por qué? Descubre cuáles son los aportes de la neuroarquitectura y entenderás el motivo:

Todo al verde

La naturaleza juega un papel fundamental en la organización de eventos. Celebrar actos al aire libre o en lugares con frondosos exteriores o, al menos, zonas verdes interiores, ayuda a reducir el estrés y mejora la actividad cognitiva. Además, la paz que se respira en el campo evita que la concentración se distraiga con ruidos externos.

Cuestión de vértigo

¿Crees que es lo mismo estar en un piso 1 que en el 20? La altura de los edificios tiene su impacto en las personas. A mayor altitud, los estímulos neuronales activan las alertas y ponen mente y cuerpo en modo supervivencia.

Trabajo… y descanso

Los espacios con zonas de descanso cercanas a donde se celebra el evento principal ayuda a que los asistentes pueden desconectar e intercambiar sinergias. Por ejemplo, en una jornada de teambuilding, disponer de un espacio de descanso permite a los participantes tomarse un break, lo que ayuda a que fijen conceptos. Al tiempo, sirve como zona de confraternización entre los asistentes.

La luz sí importa

En cuanto a cuáles son los aportes de la neuroarquitectura relativos a la iluminación, seguro que habrás notado cómo la luz artificial acelera el cansancio. Por el contrario, la luz natural facilita la concentración de las personas y crea un ambiente más confortable.

Que corra el aire

Tampoco hay que olvidar la ventilación. ¿Sabías que, según los estudios científicos, una mejor calidad de aire puede aumentar la productividad de las personas entre un 8 y un 11%? De ahí de nuevo la importancia de los espacios alejados de las grandes urbes y sus contaminadas atmósferas para celebrar cualquier evento corporativo.

Un diseño, una función

Otro punto sobre cuáles son los aportes de la neuroarquitectura a la organización de eventos es que los espacios amplios y diáfanos impactan de forma positiva en la memoria y el aprendizaje. Así, salas con techos altos son idóneas para tareas creativas, según evidenciaron John Meyers-Levy y Rui Zhu.  Por el contrario, habitaciones de pequeñas dimensiones perjudican la creatividad y toma de decisiones, pero favorecen las tareas rutinarias. No es de extrañar que sean empleadas para trabajos repetitivos.

Entre cuadrados y círculos

Hasta la forma de las esquinas puede hacer que el evento sea mejor o peor acogido. Y es que los ángulos muy marcados causan estrés, mientras que las líneas curvas dan sensación de seguridad. El hecho de que se coloque a los profesionales o a los alumnos en círculo en las sesiones de trabajo no es por capricho.

Como ves, es importante tener en cuenta las características del espacio elegido para cualquier evento. Y si buscas una instalación que reúna los aportes de la neuroarquitectura, te invitamos a conocer Hacienda Guzmán. Salas amplias, agradables y adaptadas y espacios exteriores rodeados de olivos integran esta finca olivarera con más de cinco de historia y a tan solo diez minutos del centro de Sevilla. Cuéntanos qué evento deseas organizar y nuestro equipo de expertos te ayudará a crear una experiencia única e inolvidable