De San Bartolomé a la Hacienda Guzmán, testigos de la historia
Hoy queremos contaros el porqué la Hacienda Guzmán se llama de esta forma. Ya sabéis que la Hacienda Guzmán es un enclave único, entre otras cosas, por su historia, ya era hacienda olivarera en el Siglo XVI de la mano de Hernando, hijo de Cristóbal Colón. Por ello nos preocupamos en documentar todos los hitos históricos acontecidos en nuestra sede.
Recientemente hemos descubierto el motivo de porqué nuestra Hacienda recibe el apellido de Guzmán. Hay que remontarse al Siglo XVIII, cuando don Diego de Guzmán, un joven brillante, estaba labrándose una prometedora carrera, que con 28 años le llevó a ser alcalde del crimen en Valencia, cargo que también sustentó en Sevilla, donde además fue presidente de la Audiencia y Ministro Honorario del Consejo de Órdenes. Estos méritos no pasaron desapercibidos para el Rey Carlos III, que le nombró Marqués de San Bartolomé del Monte.
De este modo, en 1761, los Guzmán fundaron su señorío sobre la que era la Hacienda de San Bartolomé, que pasó a denominarse Hacienda Guzmán. Don Diego Guzmán de Bobadilla ya tuvo un ilustre antepasado en la figura de don Gaspar de Guzmán, quien fuera condeduque de Olivares, valido y primer ministro del Rey Felipe IV, percibiéndose aún la huella de los Guzmán en Sevilla en el nombre de localidades como Olivares o Castilleja de Guzmán.
En la entrada principal de la Hacienda, tal y como se puede observar en la imagen superior, se puede ver el escudo de Guzmán, en el que hay dos calderas, elemento que simboliza la abundancia, y San Bartolomé, que identifica a quienes perteneció anteriormente la Hacienda, la frágil madera con la que está construido este San Bartolomé invita a pensar que no se ideó para este lugar, sino para una capilla.
Esta y muchas más sorpresas qué descubrir en la Hacienda Guzmán.