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Esqueje de olivo: todo lo que debes saber para crear tu propio árbol

Dijo el poeta José Martí que hay tres cosas que toda persona debería hacer durante su vida: plantar un árbol, tener un hijo y escribir un libro. En Hacienda Guzmán queremos que cumplas con tus metas y en este post te ayudamos a crear tu propio retoño vegetal -el literario y el humano, mejor lo dejamos en tus manos-. Descubre cómo convertir un esqueje de olivo en un maravilloso ejemplar adulto.

¿Qué es un esqueje?

Antes de ponerte manos a la obra, debes saber qué es un esqueje. Según el diccionario, se trata de un “tallo, rama o retoño de una planta que se injerta en otra o se introduce en la tierra para multiplicar la planta”. Por tanto, el esqueje es una técnica de reproducción de las plantas. Concretamente, es lo que se conoce como reproducción asexual, ya que no se realiza mediante fecundación.

Para conseguir la multiplicación vegetativa se pueden usar diferentes tipos de esquejes: brotes, ramas tiernas, ramas semi-lignificadas o ramas lignificadas, también conocidas como estacas. Estas últimas son el método más empleado en el caso del olivar.

¿Para qué se utilizan los esquejes en el olivar?

Gracias a esta reproducción controlada, los agricultores pueden multiplicar aquellos ejemplares que tienen un mejor rendimiento o generan aceitunas de mayor calidad, perfeccionando poco a poco su explotación. Dicho de otro modo, son capaces de “clonar” ejemplares con la misma identidad varietal y características. De ahí que sea un sistema empleado por los productores de aceite de oliva para mejorar la cosecha y conseguir mayor rentabilidad.

No obstante, también es habitual acudir a los esquejes en casos de jardinería a pequeña escala. Por ejemplo, puedes crear un bonsái único para casa a partir de un esqueje de olivo o enriquecer tu jardín con este árbol tan nuestro.

¿Cuándo se hacen los esquejes de olivo?

En la actualidad es posible realizar un esqueje de olivo en cualquier época del año, gracias a la capacidad reproductiva de este árbol, con numerosas yemas latentes, y la modernización de las técnicas de plantación.

No obstante, como te decíamos, el método más habitual en el caso del olivar es la reproducción con estacas. Como consecuencia, al ser ramas leñosas, el mejor momento para hacer un esqueje de olivo es cuando el árbol está en periodo de latencia, es decir, durante el invierno. Esto será a finales de diciembre o enero en climas más cálidos o en torno a febrero si resides en algún lugar con una climatología más adversa.  

¿Cómo hacer un esqueje de olivo?

¿Te gustaría probar a crear tu propio olivo? En tal caso, te explicamos cómo hacerlo a partir de un esqueje de olivo. He aquí un decálogo para cultivar tu clon olivarero:

  1. Es importante que la matriz sea un ejemplar sano y esté en fase de crecimiento.
  2. Como fase preparatoria de la “madre”, si puedes, no abones el árbol durante una semana y riégalo abundantemente un par de horas antes de extraer la estaca.
  3. ¿Qué rama elegir? Fíjate en las que crezcan de forma vertical y sean fuertes y rectas, con un grosor de entre 1,5 y 2,5 centímetros. ¿Una pista? Las más adecuadas suelen situarse en la base del tronco, como las varetas o chupones.  
  4. Corta o desgarra con cuidado un tallo de entre 10 y 20 centímetros de longitud y elimina las hojas en la base, pero mantén las de medios y punta.
  5. Si no lo vas a plantar inmediatamente, consérvalo en agua.
  6. Para la plantación, raspa con cuidado el tallo inferior que vas a introducir en la tierra y colócalo a una profundidad de 3 a 4 centímetros.
  7. ¿En el suelo o en una maceta? Da igual. Eso sí, si es en suelo, que tenga un buen drenaje. Si es maceta, que sea grande, con salida de agua y con un buen fondo para el desarrollo de las raíces.
  8. Como ayuda para que la clonación sea un éxito, hazte con un sustrato específico para esquejes, hormona de enraizado y fungicidas. Podrás encontrarlos en tiendas de jardinería sin problema.
  9. Debes procurar que el esqueje de olivo cuente con una hidratación apropiada y reciba luz directa. Eso supone que el sustrato siempre esté húmedo, pero sin encharcamiento de agua. Así, es recomendable nebulizarlo diariamente para que la tierra se mantenga hidratada, pero va a depender de las condiciones atmosféricas.
  10. Si has seguido correctamente los pasos y la Naturaleza no dice lo contrario, en torno a 3 o 4 semanas más tarde, el esqueje de olivo enraizará, consiguiendo tu nuevo árbol.

¿Quieres saber más sobre la reproducción por esqueje de olivo, en particular, y el sector del olivar, en general? Nada mejor que una ruta de oleoturismo por Hacienda Guzmán para profundizar en el mundo olivarero y del AOVE. A través de una amena visita a nuestra finca de La Rinconada conocerás a cultura, la historia y las tradiciones vinculadas al sector olivarero, desde cómo se cultivan nuestros olivos ecológicos, hasta cómo se cata un buen aceite de oliva virgen extra. ¡Elige tu itinerario y ven a conocernos!