5 planes diferentes sobre qué hacer en Sevilla
Más de 29,6 millones de personas visitaron Andalucía durante 2017, según el Instituto de Estadística de Andalucía. De estos turistas, el 13% eligió la capital de la comunidad autónoma como destino.En 2018, esta tendencia sigue en aumento y ha consolidado a Sevilla, como una de las ciudades referentes para viajar que no debes perderte ¿Tienes pensado visitar la ciudad hispalense próximamente? Descubre qué hacer en Sevilla más allá de las rutas típicas que te contarán las guías de viaje.
Obviamente, la Catedral, la Giralda, los Reales Alcázares, la Maestranza, la Torre del Oro y demás monumentos y puntos de interés turístico merecen –y mucho- la pena. Sin embargo, para los viajeros que quieren empaparse del sabor de la tierra y beber directamente de su cultura, proponemos 5 planes complementarios sobre qué hacer en Sevilla para que puedas llevarte una imagen nítida de ese ‘color especial’ de la ciudad.
Disfruta de la gastronomía
Paladear los platos típicos de la tierra es, sin duda, uno de los mayores atractivos turísticos de cualquier destino, pero en Sevilla, la cita con la gastronomía es visita obligada por su capacidad para mantener el regusto de antaño en sus numerosos bares y tabernas.
Comerte un montadito de pringá en las Bodegas Romero regado con un vino de naranja o un ‘pescaíto frito’ acompañado de manzanilla en Morales, degustar las croquetas de Casa Ovidio o las codornices de Casa Ruperto; sentir los casi tres siglos y medio de historia de El Rinconcillo (fundado en 1670), mientras el camarero te sirve una carrillada y apunta la comanda con tiza sobre una vieja barra, o dudar entre los diferentes platos de Los Coloniales son opciones más que atractivas para conocer la cocina andaluza.
El sábado, acércate a la plaza El Salvador, donde muchos sevillanos pasan el día entre amigos y altramuces, o ‘chochos’, como se conocen en la zona. Ponle la nota dulce a la jornada con un merengue de la histórica confitería La Campana, en pleno centro de la ciudad.
Piérdete por sus mercadillos
Otra de las actividades con encanto que te harán conocer la esencia sevillana son sus mercadillos. Uno de los principales es el llamado Mercado del Jueves, debido al día en el que se celebra, en el que se reúnen desde 1.254 puestos con todo tipo de antigüedades y artículos pintorescos repartidos por la calle Feria.
¿Qué hacer en Sevilla el fin de semana? Los sábados también puedes visitar el conocido como “Charco La Pava”, mientras que los domingos por la mañana, podrás empaparte del arte emergente hispalense en el Mercado del Arte, ubicado en la Plaza del Museo, o visitar el Mercado de Animales de la Plaza de la Alfalfa.
Ríndete a su ‘duende’
Declarado Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, el flamenco corre por las venas de Sevilla y no puedes irte de la ciudad sin antes haber escuchado su ‘duende’ en algunos de los tablaos que se reparten por sus barrios más emblemáticos.
Para asistir a una actuación auténtica a un precio razonable, lejos de los locales ideados para el turismo, puedes acudir al Museo de Baile Flamenco, impulsado por la bailaora Cristina Hoyos, al tablao El Gallo, en pleno barrio de la Cruz, o el Casala Teatro, situado dentro del Mercado de Triana.
Cambia de perspectiva
¿Quieres contemplar la ciudad a vista de pájaro? Nada mejor que disfrutar de un aperitivo en alguna de las terrazas con vistas que se esconden en diferentes establecimientos de la capital hispalense.
En los hoteles Los Seises, el Eme Catedral, el Fontecruz o el Doña María cuentan con locales abiertos al público en las azoteas desde donde podrás emocionarte con una impresionante panorámica de la Giralda. Si el tiempo lo permite, tómate un delicioso cóctel por la noche para descubrir la belleza de la catedral iluminada. Con algo más de perspectiva, el Corte Inglés de la Plaza del Duque o el hotel Inglaterra te ofrecerán una instantánea completa del casco histórico.
Practica oleoturismo
Otra de las alternativas sobre qué hacer en Sevilla es acercarse al mundo del aceite de oliva, emblema de Andalucía. A unos pocos minutos de la ciudad, en la localidad de La Rinconada, se encuentra Hacienda Guzmán, una finca con más de 340 hectáreas de olivar que llegó a ser la mayor fábrica de aceite de oliva del mundo entre los siglos XVI y XIX.
En este enclave, podrás practicar oleoturismo, una experiencia integral que te sumergirá en un viaje en el tiempo por las tradiciones del campo andaluz. Recorre su olivoteca, con más de 150 variedades de olivo, visita la almazara del siglo XVII, conoce cómo se lleva a cabo hoy día el proceso de producción de un aceite de oliva virgen extra de máxima calidad y saborea los diferentes productos de Hacienda Guzmán en una suculenta cata.
Será el broche de oro para bucear en la cultura sevillana y comprender mejor su pasado, presente y futuro.